Los dos conceptos más básicos a la hora de montar una página web

Montar una web es muy sencillo si se conocen los conceptos más sencillos y más básicos: qué es un dominio (y cómo registrarlo) y qué es un hosting. Ambos son las dos primeras cosas que deberemos tener en cuenta a la hora de montar cualquier servicio web. Y es que si nos falta alguna de ellas no podremos seguir adelante. Estos conceptos son más importante incluso que por ejemplo la elección del CMS que usaremos.

Adentrándonos en el mundo del desarrollo web

¿Qué es un dominio y cómo se consigue?

El dominio es lo que primero recomendamos adquirir. Tiene un coste desde unos pocos céntimos hasta cientos de euros, en función claro de la extensión que queramos usar. Tenemos extensiones como ".com", ".es" o ".cat", por poner ejemplos. El dominio es lo que "traduce" las IPs donde está alojada nuestra página web. De este modo, sin los dominios, tendríamos que usar una dirección IP y su uso sería mucho menos amigable.

Es mucho más fácil de recodar frases que números. Por lo tanto, gracias a esto somos capaces de conectarnos a una web tan solo memorizando su dominio (ejemplo.com) y no memorizando su IP (192.0.32.10.com). Otra de las ventajas que obtenemos con el uso de dominios es que de este modo por cada IP podremos alojar más de una web.

Para conseguir uno de estos dominios necesitamos dirigirnos a un proveedor como ANW para hacer un registro de dominios. ANW es un proveedor de servicios de Internet que fue fundado en 2001 y desde ese año se centra en ofrecer servicios de alojamiento web y registro de dominios a empresas y particulares. Durante este mes en esta compañía si registramos el hosting de manera anual tendremos tanto la renovación de nuestro dominio como el registro totalmente gratuito.

¿Qué es un hosting y cómo se consigue?

El hosting es un tipo servicio que nos permite almacenar nuestra web. Para que lo entendáis muy fácilmente, este concepto hace analogía a un hotel -host en inglés-. Cada cliente contrata una habitación. Ahora sustituimos los clientes por los webmaster y las habitaciones por el espacio que usa nuestra web en el servidor -lo que sería el hotel-.

Cuando hablamos de web nos referimos a cualquier tipo de fichero. Puede ser vídeo, archivos de texto, o lo que sea. Y es que en un hosting podemos almacenar cualquier cosa, pero en esta entrada nos estamos enfocando en la creación de una web, por lo que es el propósito que le estamos dando.

El hosting es muy fácil de usar: tenemos un panel donde podremos encontrar una especie de navegador de archivos donde subiremos nuestra web y desde donde podremos administrar todo el sitio web. Por supuesto es mucho más complejo que esto, pero se puede resumir en esta pequeña explicación. Una vez tengamos el hosting será muy fácil instalar algún CMS famosos como WordPress o Prestashop.

Del mismo modo que registramos el dominio tendremos que hacerlo con el hosting, pues tendremos que ir a un proveedor y comprar un pack de alojamiento web.

Una vez tengamos estos conocimientos profundizados podremos introducirnos ya en aspectos más avanzados: qué panel usar, qué CMS elegir, qué es el SEO y qué contenido busco para mi web, entre otras cosas. Montar una página web no es difícil, pero si un proceso muy largo y en el que aprenderemos muchos conceptos e ideas.