Crea una carpeta invisible en Windows 10
Estos días atrás, hemos estado hablando mucho del explorador de archivos de Windows 10, de cómo volver a lanzar esta aplicación en caso de fallo o bloqueo, cómo lograr que nuestros ficheros o directorios se abran con un solo click e incluso cómo restaurar las ventanas que teníamos abiertas, por lo que hoy vamos a ver un truco más en este sentido, aunque ya no está tan directamente relacionado con el explorador de archivos, pero va en la misma línea.
La idea de hoy es crear una carpeta invisible, pero para ello no vamos a hacer uso de las clásicas opciones de ocultación que ha ofrecido Windows desde hace años, no, en este caso vamos a dejar los atributos tal cual y nos vamos a centrar en hacer que sea invisible al ojo humano, incluso si pedimos al sistema que nos muestre los archivos y directorios ocultos.
El truco lo realizaremos en dos partes:
- Ocultar el icono de la carpeta
- Crearemos un nuevo directorio en la ruta que deseemos y la dejamos por defecto
- Pulsamos con el botón derecho sobre ella y seguidamente en Propiedades
- Pulsamos en la pestaña Personalizar y seguidamente en Cambiar icono...
- Seleccionamos uno de los iconos que está en blanco, que no es nada
- Aceptamos todas las opciones
- Con esto nuestra carpeta ya no tendrá icono, pero se seguirá viendo el nombre
- Ocultar el nombre de la carpeta
- Renombramos el directorio en cuestión con la siguiente combinación de teclas:
ALT+0160 - Aceptamos
- Renombramos el directorio en cuestión con la siguiente combinación de teclas:
El icono que habremos seleccionado es el siguiente:
Lo que veremos tras este proceso es lo siguiente, un directorio sin icono y sin texto, pero que al hacer una selección de ratón vemos que está ahí, que sí existe y que es totalmente funcional.
Con estos dos pasos, hemos logrado que nuestra carpeta no tenga icono alguno, pero además, que no tenga nombre como tal, por lo que a efectos prácticos se ha convertido en invisible al ojo humano, ahora bien, si pasamos el ratón por encima nos percataremos que en ese lugar sí existe algo, que podemos abrirlo y ver su contenido.
Si con este truco no nos es suficiente para proteger nuestro nuevo directorio, ahora sí que podemos optar también por convertirlo en oculto, logrando así que desaparezca del todo y que no se muestre ni con el paso del ratón.
Por lo tanto, si quieres crear una carpeta o directorio que sea invisible al ojo humano, ya sabes que con tan solo cambiar el icono y el nombre, podemos lograrlo de forma sencilla y en unos pocos segundos